Vicente Puchol
Vicente Puchol
Cierto Escritor y Otros Relatos

Cierto Escritor y Otros Relatos

 

SINOPSIS DE “CIERTO ESCRITOR Y OTROS RELATOS”

 

Los seis relatos contenidos en este libro son independientes, unos de otros, y de diversa extensión, pues el primero –El doctor se jubila- tiene solo un folio y el último –Cierto escritor- más de cien. Sin embargo, todos están atravesados por la misma lanzada ética.

 

La belleza de una página literaria no puede existir sin el asentimiento ético del lector, ya sea aprobando la acción o la situación, en cada caso, o desaprobándolas, conforme a un patrón ético que el escritor habrá dejado implícito en la página. La adecuación entre el autor y el lector en ese patrón ético es indispensable, repito, para que la página literaria sea bella.

 

Los seis relatos son distintas incidencias de la vida, en las que el azar y las circunstancias –y la inspiración del autor- se aliaron, para crear a los personajes situaciones que habrán de resolver a su modo, o dejarse arrastrar por ellas.

Haré una breve consideración de cada relato:

En “El doctor se jubila”, el personaje recibe, de repente, al levantarse de la cama, un choque con la realidad. Cree, por un momento, que su jubilación es un sueño del que despierta, atónito, al comprobar que no lo es.

 

“El indulto” es la condena a muerte de un inocente, sabiendo el tribunal que lo es, pues la presión política –es un consejo de guerra, después de una guerra civil de exterminio- lo condena a muerte, pidiéndose en la sentencia, como única opción del consejo de guerra, la conmutación de la pena de muerte por otra de rango inferior. Pero los denunciantes se revuelven de nuevo con otra querella solicitando del consejo de guerra la abolición de esa petición de clemencia, manipulando toda clase de argucias. El imputado era el primer birrete de España –cuatro doctorados de cada una de las licenciaturas impartidas en la ciudad: medicina, derecho, filosofía y letras y ciencias-, nombrado rector vitalicio de la universidad por acuerdo unánime de los cuatro decanos de las facultades mencionadas. Los denunciantes fueron cinco médicos, encabezados por un discípulo querido del denunciado, –un tipo cínico y odioso- integrados todos en el Movimiento nacional victorioso-, fanáticos y corroídos por la envidia, pecado capital de la sociedad española. Los hechos narrados no coinciden exactamente con la realidad –se han dado otros nombres y cambiado ciertas actuaciones en el proceso-, para evitar susceptibilidades de los parientes de los asesinos, pero son una representación de la verdad real sucedida: uno de los crímenes más nefandos del régimen franquista.

 

“El psicólogo prodigioso” es un relato humorístico, basado en el absurdo. El socio mayoritario de una sociedad la mantiene embarrancada, y se opone a cualquier innovación o renovación, necesaria para subsistir, debido a su demencia senil o a un carácter indomable y estúpido. Y acaba huyendo de ella y vendiendo todas sus acciones a los demás accionistas, desgarrado por la pasión del absurdo.

 

“El triple concierto”, el preferido por el autor, es una historia amorosa, acechada por un tercer hombre, el amante anterior de la dama, la cual no quiere perder su amistad, ni causarle daño a él  ni a su marido. La narración transcurre, por tanto, en la más rigurosa clandestinidad, que da lugar a múltiples conflictos en el amante actual.

 

“Una vida rasgada” hace referencia al ejercicio impune de la medicina, ante la indiferencia de los tribunales –ya que los médicos testifican contra el querellante, protegiéndose mutuamente- y a los traumas consiguientes  desencadenados en el hijo de la víctima, cuyo descuido  por el cirujano tipifica, claramente, el delito de homicidio por imprudencia temeraria. El clamor de historiador Tácito, en el senado romano, contra los que practicaban la medicina, no deja de oírse, a pesar de los siglos: “Habéis convertido la más hermosa de las profesiones liberales en sórdida mercadería.”

 

Finalmente, “Cierto escritor”, que titula el libro, es el relato más extenso. Narra el abandono de la abogacía de un hombre que, además de abogado, es escritor, y sus avatares para abrirse camino en el mundo literario español, turbio y hostil, pues resulta intolerable, en él,  que pretenda escalar el olimpo literario sin pagar la tasa de la publicidad de su persona, sea cual sea su procedencia.